Mi experiencia fue increible, maravillosa, genial, con ganas de más y aunque acabé muerta de cansancio, repetiría una y mil veces. Porque ir de excursión con compañeros de clases es realmente magnifico, se lo pasa uno pipa con momentazos épicos para recordar. Una maravilla. Cuando llegué a Roma me sentí como en casa, parecía que seguía en mi hogar.
Aunque no pude hacer muchas fotos en condiciones por medio de que me quedaba embobada mirando el paisaje y en vez de capturarlo con la cámara lo capturaba con la vista, ¡y que fallo! pero aun así tengo fotos de sitios preciosos que espero que os gusten y animaros a ir a Roma si aun no habéis ido, porque uno no se puede morir sin ver Roma al igual que sin ver París. Dos ciudades emblemáticas a mi parecer.
Son poquitas fotos, pero estoy segura de que cuando vuelva a Roma vendré con montones de fotos.
¡Feliz día!
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Martha.