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miércoles, 10 de septiembre de 2014

Querido verano...


Verano, 
es esa estación del año
donde todo pasa más rápido
donde el mar es el protagonista 
y las olas devoran amores fugaces

Verano,
es donde te dejas llevar,
donde te pierdes entre los días
y te encuentras serena y radiante

Verano, 
es eso que pasa sin avisarte 
que echas de menos a primero de septiembre.


Vengo a contaros -después de mucho tiempo- el verano tan formidable que he pasado. Aunque ya ha pasado varias semanas desde que volví de mis vacaciones, hasta ahora no he tenido la oportunidad de contaros que volvería a repetir mis días de playa con los amigos de toda la vida. Me atrevo a decir que echaba de menos esas vacaciones rodeada de esos amigos -mi infancia está marcada por los días en la nieve, en la playa y en la montaña que pasábamos juntos- y espero que no tarde mucho en  volver a tener esa oportunidad. He de decir que no soy fan del verano, yo de mi invierno no hay quien me saque y aunque viva en tierras calurosa disfruto más del invierno que del verano. 

Mis días en Chiclana de la frontera, Cádiz, en la mejor playa de España, La barrosa han sido totalmente relajantes, y sobre todo los primeros días que estaba decaída por la humedad del lugar y no sabían otra cosa que ofrecerme coca-cola para subirme el ánimo. Pero aun así, ha sido genial ir a la playa cuando me apetecía y ponerme a leer el magnifico libro El verdadero caso de Harry Quebert que estuvo la mar de interesante, lo recomiendo. Un día fuimos a unos miradores con vistas preciosas, y otro día fuimos a Cádiz donde vimos un partido de fútbol. Los demás días lo pasábamos en la playa y por la tarde volvimos a disfrutar de la preciosa puesta de sol que años atrás -en mi infancia- tuve la oportunidad de posar como cual sirenita. Y como decía el amigo de mis padres, ir de vacaciones y pasarlo bien, de puta madre o fatal, de pena es cuestión de actitud. Según tu actitud es como pasarás las vacaciones y os voy a decir una cosa, en vacaciones la actitud debe de ser de puta madre porque para una vez al año que nos alejamos de la rutina, de nuestro maldito jefe o de los estudios pues hay que saber desconectar de todo ello y disfrutar a tope. 

Y con los ojos cerrados volvería a pasar unas vacaciones entra amigos. ¡Hasta el año que viene querido Verano!

Aquí os dejo unas cuantas fotos que hice en mi estancia allí. ¡Espero que os guste!